En Santa Fe el Patrono no lo eligieron ni reyes ni papas: salió de un sorteo. Así, San Jerónimo quedó ligado para siempre a la historia de la ciudad desde sus primeros días.
📌 Qué pasó:
📜 En 1573, Juan de Garay fundó Santa Fe y, como era costumbre en la época, se debía definir un santo patrono para proteger la nueva ciudad.
🎲 La elección no fue por votación ni por decreto: se hizo por sorteo entre varios santos. La fe y el azar tenían la última palabra.
🙌 El nombre que salió fue el de San Jerónimo, y desde entonces, cada 30 de septiembre, se lo celebra como protector de Santa Fe.
🏰 Ya en 1590 hay registros de fiestas en su honor en Santa Fe la Vieja: procesiones, misas y hasta corridas de toros.
✍️ ¿Quién era? San Jerónimo (Eusebio Hierónimo Sofronio) nació en Dalmacia, fue un gran erudito y tradujo la Biblia al latín en la famosa “Vulgata”.
🦁 En el arte aparece con un león (que según la leyenda lo acompañó tras curarle una herida), con libros (su rol de traductor) y con una calavera (símbolo de lo efímero de la vida).
⚖️ Para la Iglesia es símbolo de sabiduría, disciplina y devoción. Para Santa Fe, además, es parte de la identidad misma de la ciudad.
⛪ Sus imágenes más antiguas todavía se conservan en la Catedral, Guadalupe y el Museo Histórico Provincial.
🧠 El dato:
🌍 San Jerónimo no solo es patrono de Santa Fe: también de los traductores. Por eso, cada 30 de septiembre, además de su fiesta, el mundo entero celebra el Día de la Traducción.

